La " Carta VII " es, seguramente, la más editada y comentada de la colección de trece cartas transmitida junto a los diálogos de Platón y el resto de textos espurios atribuidos al filósofo ateniense. A pesar de que la polémica sobre la autenticidad de la autoría ha perseguido a este documento desde la Antigüedad hasta nuestros días, resulta un testimonio de incalculable valor literario y filosófico para acercarse tanto al propio Platón, como al mundo de la Academia y al tumultuoso contexto político de Sicilia, una de las áreas culturales y sociales más importantes en toda la época clásica. En la " Carta VII " se hace una relación de sus dos últimas estancias en Siracusa en la corte del tirano Dionisio II (367 y 361-360 a.C.). Sea o no del propio Platón, no se puede dudar del interés que suscita este relato en primera persona acerca de las turbulentas peripecias del gran filósofo en su relación con el poder y la praxis política concreta.