Todo contrato, al definir aquello que es jurídicamente exigible a cada una de las partes, mira necesariamente hacia el proceso. En efecto, la misma concepción de los términos del contrato tiende ya a facilitar su actuabilidad procesal. En el Derecho romano, esta anticipación por el contrato de la defensa procesal iba con frecuencia más allá. En ocasiones, el mismo contrato tenía por finalidad el facilitar a una de las partes una defensa de sus derechos más sencilla y cierta: éste era el caso de los contratos verbales de garantía en la compraventa; o el de aquellos que el iudex ordenaba concluir a las partes, a fin de asegurar la permanencia del statu quo impuesto por la sentencia por medio de una constricción contractual. La presente obra concierne esta vertiente procesal del contrato verbal en Roma. Proponemos al lector un estudio de las categorías empleadas por los juristas romanos clásicos para encuadrar este uso procesal del contrato, y particularmente de las stipulationes communes. Pretendemos así arrojar luz sobre el funcionamiento y sobre la evolución histórica del uso del contrato verbal en el proceso privado romano. Al hilo de este estudio histórico, podemos interrogarnos acerca de la interacción (de doble sentido) entre la voluntad de las partes y el marco necesariamente rígido fijado por las normas procesales.