La figura de Teresa aparece, en su tiempo y en el nuestro, como una figura reformadora. Teresa sigue siendo una pionera carismática, capaz de conjugar las «cumbres» de la contemplación de los misterios divinos con el servicio y la humanización de las gentes de su tiempo y de nuestro tiempo; une lo «sagrado» con lo «profano»; los «pucheros» y las conversaciones con los «serafines». ¿Pará que escribir un libro más sobre Teresa? Pretendo dar a conocer la vida y obras de Teresa a personas que no estén familiarizadas con la literatura religiosa-espiritual, y menos con la mística. Más que narrar su vida, intento contagiar el deseo de leer las obras mayores de Teresa.