El trabajo sobre la prueba de la realidad de la operación que origina el gasto o el derecho de deducir el IVA soportado, constituye un análisis exhaustivo de la doctrina y la jurisprudencia relacionadas con la cuestión, y su lectura y consulta permiten una idea profunda sobre la situación de la prueba de la realidad en prácticamente todos los casos posibles; y sobre las respuestas dadas por la Administración y los Tribunales, y los problemas que éstas plantean. Asimismo, propone las cautelas y alternativas que, desde el punto de vista jurídico, caben para aceptarlas o para hacerles frente. Para cumplir el objetivo perseguido se ha realizado una labor analítica que, siguiendo un índice exhaustivo, ha permitido partir de un criterio jurídico general y localizar, caracterizar y plantear soluciones a toda una diversidad de problemas. Además, se incluye una relación cronológica de las aproximadamente doscientas sentencias estudiadas, con una mención a las cuestiones más interesantes tratadas en cada una de ellas, así como una relación de la bibliografía utilizada. En muchas ocasiones las cuotas de IVA a soportar, o los gastos, son rechazados porque, a pesar de demostrarse la realidad, otras consideraciones inciden en la decisión final, y éstas no se basan siempre en la adecuación a derecho de la conducta del sujeto interesado, sino en la de terceros, cuya aclaración depende a veces del impulso que la Administración decida dar al procedimiento. La carga de la prueba, entendida como obligación de acreditar so pena de tener que asumir las consecuencias materiales de un acto administrativo o una sentencia, es también compleja, porque se basa en gran medida en el principio de facilidad probatoria, a veces conflictivo en el procedimiento administrativo, impulsado por la Administración según su criterio. El trabajo pone de manifiesto que los meros incumplimientos demostrados de terceros pueden dar lugar a situaciones con consecuencias similares a las de la responsabilidad objetiva o la derivada de infracciones, sin que consistan en esto, y formula criterios de depuración para estas situaciones. Además, en los casos que estudia el trabajo los hechos probados se derivan frecuentemente de la utilización de la “prueba de indicios”, que se analiza de forma intensa y extensa, en su planteamiento general y en relación con la casuística que la caracteriza. También se analiza la factura como fuente de prueba, y las especificidades que su apreciación plantea, en relación con el resto de documentación accesible y con los propios hechos.