En la historia cultural de la Argentina, Gino Germani es ampliamente reconocido por su rol como gestor en la formación de la sociología científica y por sus hipótesis sobre el significado del peronismo. Pero entre todas las facetas que constituyen su figura canónica, se le ha prestado muy poca atención al curioso consultorio sentimental que desarrolló junto a la fotógrafa alemana Grete Stern en la revista Idilio entre los años 1948 y 1951.