A través de estas páginas biográficas de Francisco Palau y Quer captamos que las carmelitas misioneras pueden vivir con fidelidad e intensidad una vocación con profunda raigambre en el espíritu del Carmelo. El Carmelo misionero enriquece el patrimonio de la familia teresiana, que viene de su misma raíz vital, de la experiencia religiosa del P. Fundador. En el momento de ahondar en la propia historia, al reclamo de la Iglesia actual, logramos identificar con exactitud la aportación más original del P. Palau.