Este libro ofrece una recopilación de las visiones y revelaciones de la beata Ana Catalina Emmerick sobre la Vida Pública de Jesús. Se ha tomado como criterio de selección recoger sólo las que aluden a escenas recogidas en alguno de los cuatro evangelios, siendo así un valioso complementyo que puede ayudar a la fe de los creyentes. Destaca la agudeza teológica y moral que podemos hallar en muchas de estas páginas, además de la consabida sensibilidad y belleza de las descripciones que hace la beata de los personajes y entornos que describe. No en vano escribía León Bloy, escritor y novelista francés: La hermana Ana Catalina Emmerick, la vidente estigmatizada de Dülmen es, a mis ojos, el más grande de todos los poetas, sin exepción. Es tan grande y tan poeta que, cuando pienso en ella, todo desaparece. Se puede apreciar también en estas páginas que la vidente no pierde oportunidad, como mujer que es, de meditar sobre el papel de María Magdalena en especial, y de muchas otras mujeres en el entorno de Jesús, desde la prima y amiga de María, Isabel, la madre de Juan el Bautista, hasta las que se reunían con la madre de Jesús y los apóstoles después de la Ascensión y antes de Pentecostés.