“El juego es una acción u ocupación libre, que se desarrolla dentro de unos límites temporales y espaciales determinados, según reglas absolutamente obligatorias aunque libremente aceptadas, acción que tiene su fin en sí misma y va acompañada de un sentimiento de tensión y alegría y de la conciencia de “ser de otro modo” que en la vida corriente”. J. Huizinga, Homo ludens. Hablamos de juego y actividades lúdicas, porque este es el punto de partida de la propuesta que presentamos: la relación entre lo afectivo y lo intelectual. Es en el juego y en las actividades planteadas como divertidas y explorativas –con la intervención de todos los sentidos, la movilidad física, la expresión corporal y verbal- donde nos queremos situar y mostrar en la práctica que pensar es también divertido y que, el esfuerzo que a veces supone, tiene muchas compensaciones, porque nos proporciona alegrías y satisfacciones. En este libro y en todo el proyecto Noria queremos recuperar el valor educativo del juego y, además, queremos convertir actividades que podríamos denominar “escolares” en actividades lúdicas, presentándolas como ejercicios amenos.