A mis amigos, creyentes e increyentes, dedico este librito. Sobre todo a mis amigos increyentes. Aunque sólo sea por simpatía, sé que muchos van a leerlo. El librito, como una carta un poco extensa, da respuesta indirecta sobre la cuestión «por qué, para qué soy creyente». Recordando la historia y el estilo de un creyente tipo, ejemplar. Nos enseñó a ser creyentes, nos marcó, a quienes veníamos del siglo XX hacia el siglo XXI. Su estilo, sus ideas, sus palabras son la respuesta: Por qué, para qué.