El P. Michael Lapsley, sacerdote anglicano implicado en la lucha contra el apartheid en Sudáfrica, recibió en 1990 un paquete-bomba que le provocó la pérdida de sus manos y de uno de sus ojos. Tras este atentado, el P. Lapsley percibió la necesidad de sanación y reconciliación de la Sudáfrica del pos-apartheid y redescubrió su vocación: usar su experiencia traumática para promover la sanación de otros, primero en Sudáfrica, y ahora también en todo el mundo. Esta autobiografía narra la trayectoria de su vida, desde su toma de conciencia de la exigencia radical de seguir el Evangelio y su firme identificación con la lucha por la libertad de Sudáfrica, hasta su transformación en sanador herido. Este libro constituye un valiente y sincero testimonio de una vida comprometida que anima a enfrentarse a cualquier sufrimiento o adversidad con un corazón lleno de coraje y perdón para conseguir la sanación.