El agotamiento de combustibles fósiles, sumideros de residuos y del propio sistema político y económico resumen el origen de este trabajo, centrado en las transiciones socio-ecológicas y energéticas. El agotamiento es también social; una sociedad exprimida por la explotación laboral, los ajustes estructurales y el culto al crecimiento. Una economía que gira alrededor de la acumulación y la especulación financiera y se olvida de la vida, las personas, las comunidades y los ecosistemas. Este panorama empuja a muchas personas a transformar la realidad y avanzar hacia otros futuros posibles. Existen proyectos políticos, sociales, técnicos y vitales que están construyendo alternativas a ese modelo agotado y agotador.