En el informe Perspectivas del empleo de la OCDE 2014, se examinan en profundidad las tendencias recientes de trabajo y sus perspectivas a corto plazo en los países de la OCDE. Se centra la atención en el modo en que ha afectado la crisis a los salarios, mostrando que el crecimiento de los salarios reales de los trabajadores mal remunerados ha experimentado una considerable desaceleración. Aunque la moderación del crecimiento de los salarios puede contribuir a restablecer la competitividad y el crecimiento del empleo, lo cual es esencial para reducir el paro, también es importante la calidad del empleo que está creándose. En algunos países, es necesario reformar la legislación de protección del empleo para reducir el elevado nivel de empleo no indefinido. Las competencias son un determinante fundamental de las posibilidades de una persona de tener un empleo de calidad, como lo demuestran los resultados de la International Survey of Adult Skills de la OCDE. Esas posibilidades dependen no solo de las competencias que ya posean los trabajadores sino también de cómo se utilicen en el centro de trabajo, lo cual refleja, a su vez, las instituciones y las políticas del mercado de trabajo de los países.