Este libro constituye el VI y último volumen de las Obras Escogidas de L. S. Vygotski. Como ya señalaban Amelia Álvarez y Pablo del Río en el Prólogo a la edición en lengua castellana en el Volumen I en 1990, no han sido pocas, ni menores, las dificultades que ha habido que superar para poner a disposición de los lectores hispanohablantes este importante capítulo de la Psicología. En esa permanente tensión entre la biología y la cultura, que en tantas ocasiones ha llevado a la negación de una frente a la otra, la obra de Vygostki constituye por méritos propios un referente fundamental de nuestra disciplina. La mejor muestra de su originalidad es que los problemas abordados siguen siendo temas relevantes y objeto de importantes debates. Cabe destacar en este volumen trabajos tan importantes, e inéditos, como El instrumento y el signo en el desarrollo del niño (1930), donde se confrontan la inteligencia práctica, que en esos mismos años abordaban las investigaciones de Köhler con chimpancés o el propio Piaget en los niños, con la aparición del signo, de la inteligencia representativa. O el que titula la Doctrina de las emociones. Investigación histórica psicológica, escrito entre 1931 y 1933 y también inédito. De nuevo la tensión entre los aspectos más antiguos de nuestro sistema nervioso y la importancia de la perspectiva histórica y cultural para abordar su comprensión. Finalmente destacar uno de sus trabajos póstumos, la Psicología de la creación del actor, publicado en 1936 y que muestra la profunda importancia que el Arte y el artista tenían en el enfoque psicológico de Vygotski. De nuevo un motivo para encontrar en estas Obras Escogidas una profunda reflexión sobre temas que siguen teniendo enorme importancia en la psicología y la educación del siglo xxi. Ha valido la pena el largo proceso de su traducción al español para poder contar con quien sigue siendo un clásico tan actual en la ciencia, el arte y las humanidades.