Este libro es un testimonio único en el mundo sobre el campo de exterminio nazi de Mauthausen: centenares de fotografías que nos muestran desde dentro toda la crueldad de un sistema. Son imágenes tomadas por los propios SS cuando el campo estaba en plena actividad, como tantas otras que fueron destruidas por los nazis cuando se acercó su derrota. ¿Cómo pudieron salvarse éstas? La clave está en Francisco Boix, un joven inquieto, arriesgado y de fuerte carácter. Preso en Mauthausen y empleado en el laboratorio fotográfico que con la ayuda de varios compañeros consiguió sustraerlas y ocultarlas durante años. Boix recogió desde los primeros minutos las escenas más impactantes: tanto la alegría de la libertad y la dignidad recobradas como los últimos golpes del horror.