Un delincuente nunca le abriría la puerta a un adulto desconocido, y sin embargo permite que sus hijos inviten a amigos que se mueven libremente por toda la casa. Lo que menos imagina el delincuente es que uno de los chicos ha colocado micrófonos ocultos en todas las habitaciones, ha hecho copias de los archivos de su ordenador y ha robado su agenda personal. El chico trabaja para Cherub, una unidad muy especial de los servicios secretos. Primera entrega de la serie que ha causado furor en los jóvenes lectores del Reino Unido y otros países, además de ser premiada con el Red House Children’s Book Award. Cherub (querubín) es una poderosa organización creada después de la Segunda Guerra Mundial. Actualmente cuenta con más de 250 jóvenes agentes, con edades comprendidas entre los diez y los diecisiete años, y desarrolla una arriesgada actividad para preservar la seguridad mundial. La razón de su existencia sigue siendo la misma que motivó su creación: los adultos nunca sospecharán que unos chicos tan jóvenes puedan vigilarlos muy de cerca y frustrar sus planes delictivos. Por supuesto, a efectos oficiales, estos chicos no existen