Las vivencias que los jóvenes expresan en sus valoraciones ponen de relieve algunos aspectos de fondo de la escolarización y expresan algunas de las dificultades que tiene nuestro Sistema Educativo para que todos los destinatarios de la propuesta educativa puedan alcanzar aquella meta de una renta educativa, básica y mínima. Por otra parte, permite observar cuándo y en qué aspectos la tensión entre ciertos sujetos y la oferta institucional deviene en ruptura. En este análisis observamos la profunda contradicción que recorre de arriba abajo el conjunto de nuestro Sistema Educativo. Se trata de la contradicción entre la diversidad (del alumnado) y la cultura de la estandarización en los funcionamientos institucionales, es decir, entre las necesidades sociales y la respuesta institucional.