En la obra de Améry es imposible distinguir entre sí, los géneros literarios, diferenciar el ensayo de la autobiografía y ésta de la reflexión filosófica y literaria. La autobiografía es la base de todo, pero los datos biográficos que narra el autor son escuetísimos, por no decir mínimos. Con gran economía de medios, incluso con laconismo, los expone como hechos que jalonan las reflexiones a que inducen. Éstas son las que vertebran temáticamente su obra.