Luchadores del ocaso es un estudio sobre la resistencia armada, la violencia política y la represión en la Asturias de posguerra. Indaga en las formas, procedimientos, usos, justificaciones y fines de la violencia política practicada entre 1937 y 1952. Durante estos tres lustros, los vencedores creyeron conveniente renovar a diario el «pacto de sangre» suscrito para recuperar, desempeñar y legitimar el uso del poder. Luchadores del ocaso repasa el perverso manual de horrores puesto en práctica para mantener movilizado al partidario y cercenar cualquier atisbo de esperanza en el disidente. Los Luchadores del ocaso fueron los perdedores de la Guerra Civil que no entregaron las armas tras la derrota republicana y los que tuvieron la osadía de regresar desde el exilio para compartir su quimérico sueño, pero también los que se mostraron dispuestos a arrostrar su mismo destino brindándoles su apoyo, casi siempre de forma abnegada. En Luchadores del ocaso se reconstruye la asfixiante atmósfera de odio y venganza en la que se desenvolvieron, atrapados entre su derecho a existir y la violencia política desencadenada para aniquilarlos. Luchadores del ocaso recorre un agónico camino de esperanzas frustradas, destrucción y extermino, no exento de dignidad y heroísmo. Desnuda los aspectos más abyectos de nuestra condición, la embriagadora adicción que puede suscitar la capacidad de dominar y destruir al otro, pero también deja entrever hasta qué punto el escenario más sórdido se ilumina, cuando menos se espera, con destellos de compasión y gallardía. La contextualización temporal y espacial de Luchadores del ocaso no impide que contenga una ambivalente reflexión sobre el ser humano y sus contradicciones, de la que cabe entresacar aleccionadoras experiencias y conclusiones sobre los aspectos más oscuros de nuestro pasado inmediato y, por tanto, sobre nuestras perspectivas como colectividad. En réplica al revisionismo neofranquista, Luchadores del ocaso pretende demostrar que el régimen franquista no fue una dictadura modernizadora, sino un sistema de dominación social que recurrió al uso sistemático de la violencia y el terror para perpetuarse.