El protagonismo de los políticos conservadores valencianos durante la Restauración fue muy notable, y resulta ciertamente significativo que el pronunciamiento militar que instauró el nuevo régimen se produjera cerca de Sagunto. Su oposición al proyecto canovista, por considerarlo excesivamente liberal, les llevó a enfrentarse a la política oficial y les obligó a adoptar una serie de estrategias destinadas a alcanzar su control sobre la política provincial. Este libro pretende cambiar algunos de los estereotipos existentes sobre los políticos valencianos, especialmente los que hacen referencia a su pasividad y sumisión respecto a los distintos gobiernos, ya que como señalaba uno de sus representantes más destacados, Cirilo Amorós, su actitud era de “col•laboració amb Madrid i de combat per sotamà”. Esta filosofía tan peculiar fue seguida por él y sus sucesores, adaptándola con notable éxito en cada momento a las circunstancias y situaciones de la política valenciana y española.