A trasvés de los dibujos de Ramon Valverde descubrimos un país extraordinario, donde la narturaleza está viva y modifica constantemente su paisaje. Paisajes sin árboles para quedarnos en silencio y disfrutar de los millares de pájaros que nos acompañan continuamente. Islandia, una isla al borde del mundo y al borde de lo habitable.