La señora González deposita en el buzón una carta para la señora Lairla. Pero cuando el cartero conduce su bicicleta por las afueras del pueblo, cae dentro de un pozo oscuro. Tan oscuro como la boca de un enorme pez. El enorme pez cae por una corriente tan caudalosa como la garganta de un gigante sediento, que a su vez...