No se puede entender a los seres vivos estudiando cada célula u organismo aisladamente. Los organismos son sistemas estrechamente vinculados, componentes fijos, y sus conexiones son tan importantes como los componentes en sí. Los avances en este campo han permitido progresar en el estudio del control de los genes y la herencia, en el desarrollo de medicamentos para el cáncer, el conocimiento de cómo funciona el cerebro y el descubrimiento de que las bacterias y otros microbios que viven en el tubo digestivo pueden causar malnutrición y obesidad.