Para resolver el conflicto por su sucesión, el shogun Ieyasu Tokugawa, deja sin efecto la prohibición de guerra y convoca un duelo a muerte entre dos clanes de ninjas rivales, los Iga y los Kôga. El vencedor gobernará Japón durante los próximos mil años. Cuando comienza la cruenta lucha, un inesperado romance florece entre Gennosuke y Oboro, los próximos líderes de cada clan, cuyos destinos están inexorablemente unidos a los de sus familas. Los desventurados amantes deberán elegir entonces entre el amor verdadero y el destino. ¿Podrá su amor acabar con una rivalidad de cuatrocientos años? ¿Triunfará la vida o la muerte? Una novela épica apasionante, un inolvidable viaje al Japón feudal. El mejor relato que se ha escrito sobre estos samuráis de la sombra, en el que se inspiró el manga Basilisk (Premio Kôdansha 2004), y el anime del mismo título. Una novela debe ser, ante todo, interesante: debe tener atractivo en el desarrollo de su trama para que cualquier persona, en cualquier lugar y en todo momento se sienta atrapado en su narración. Esa es para mí la novela, por excelencia. Por eso, si tuviera que escoger una palabra para describir mi opinión sobre las obras de Yamada Futârô, la expresión adecuada sería: me enganche a su lectura. Es cierto que ha habido muchos autores a los que, desde mis años jóvenes, he leído con placer; sin embargo, no ha habido otra novela como esta que me haya apasionado tanto atrapándome en su trama, hasta el punto de hacerme sentir como si yo mismo fuera un ninja. Kusaka Sanzô, escritor de novelas de misterio, y coordinador del Museo del Misterio de Japón.