La historia demuestra que ejercer el poder desde el trono nunca ha sido sencillo. Y aún más difícil lo han tenido las mujeres que, desde la Antigüedad, han accedido a él. Todas las reinas reunidas en este volumen han pasado a la posteridad porque demostraron más audacia, diplomacia e inteligencia que muchos de los hombres que estuvieron en su misma posición.