Sólo con el corazón abierto, una mente receptiva y libre y el contacto con las estrellas de la sabiduría que aflora en tu interior, podrás cosechar los copiosos dones que te están destinados. Leyendo cada día estos inspiradores aforismos de amor, alegría y sabiduría llegarás a ser la maravillosa criatura que, por nacimiento, estás destinado a ser.