Los atajos hacia el crimen, el pecado y la pasión esconden giros que pueden abocarnos a los callejones sin salida de la ley, la obsesión y la paranoia. Observador detenido de la conducta humana en sus aspectos más escabrosos, Martí ha retratado las tinieblas contemporáneas con una claridad hipnótica y escalofriante de la que es buena prueba esta antología de relatos breves donde se alternan la sospecha de la fe y la realidad de la carne, la sordidez de la urbe y los misterios del extrarradio. Los personajes que habitan estas atmosféricas páginas sufren y desean con una intensidad cegadora, definitiva, que va mucho más allá del realismo sucio. Una lectura certifica que las historietas de Martí, gran príncipe negro del cómic subterráneo, son a la crónica negra lo que la poesía decadente es a la literatura universal.