A lo largo de los siglos, la biología y la cultura de la especie humana han evolucionado. Pero mientras que la evolución de la primera se ha producido de forma muy semejante en todas las poblaciones del globo, la de la segunda ha experimentado un desarrollo explosivo, basado en descubrimientos científicos y tecnológicos, y solo se ha podido llevar a cabo en unas circunstancias y unas condiciones favorables. En los casos en que estas no se han dado, muchas poblaciones humanas no han podido disfrutar los beneficios de la evolución cultural.