Concluida la Guerra Civil, en un contexto histórico, social y artístico fuertemente ideologizado y caracterizado por un dirigismo oficial, se retomó la organización de las exposiciones nacionales de Bellas Artes, que desde 1856 venían celebrándose en España como un instrumento del Estado para la protección y desarrollo del arte español. En el presente volumen se lleva a cabo un análisis individualizado de cada uno de los certámenes que se celebraron entre 1941 y 1968, tanto en sus aspectos de organización interna como, desde una perspectiva crítica y artística, de las secciones de pintura, escultura y arquitectura en que se estructuraban a través de un copioso e inédito material archivístico y hemerográfico, que se completa con la inclusión de numerosas ilustraciones. El libro está dirigido a estudiantes, docentes investigadores en universidades y centro de investigación y público general interesados en la historia, la crítica y los procesos de institucionalización del arte en España durante el periodo franquista.