Junto al barro y la piedra, el oro y las plumas, la obsidiana ocupa un lugar de honor, aunque poco estudiado, en el arte, la ornamentística, la utilería doméstica, la manufactura de armas y las ceremonias rituales. Este libro colma este vacío con sus meticulosos estudios (yacimientos, extracción, intercambios, útiles y ornamentos) y con el despliegue a todo color de las fotografías de Michel Zabé.