La Ley de Sociedades Profesionales ha venido a colmar una laguna legal existente en nuestro ordenamiento jurídico al otorgar carta de naturaleza a la sociedad profesional, a la que regula como una categoría especial de compañía con flexibilidad organizativa, con lo que se da respuesta al proceso de societarización del ejercicio profesional colegiado, ampliamente demandado por el sector. Sin embargo, el escaso contenido normativo, las imprecisiones conceptuales y la, a veces, falta de rigor científico de la Ley, defectos que surgen del intento de regular unitariamente estructuras societarias de tipología muy diferente, llevan a la conclusión de que la técnica legislativa elegida no ha sido la más acertada. El autor, con el propósito de contribuir a la exégesis y conocimiento de las sociedades profesionales, aborda la conceptuación y caracterización de esta nueva modalidad societaria profundizando en su peculiar régimen jurídico, sin olvidar que, al poder adoptar cualquier tipo legal preexistente, se ha optado por analizar también los requisitos comunes de los tipos básicos que pueden elegirse para su constitución, en este caso las sociedades de corte capitalista, procurando incidir en los aspectos menos afortunados de la normativa con miras a procurar soluciones interpretativas de orden práctico. La obra está totalmente actualizada y recoge las reformas introducidas por la Ley 3/2009, de 3 de abril, sobre modificaciones estructurales de las sociedades mercantiles.