En el valle de los molinos viven hombres, mujeres y niños como los que hay en todas partes. Un día, llegaron al valle las máquinas perfectas con una gran oferta. Apretar un botón y todo el mundo podría vivir en un mundo perfecto. Ya no sería necesario soñar. ¿Estaban dispuestos todos los habitantes del valle a dejar de hacerlo?