Desde la prehistoria, el ser humano ha necesitado conocer su entorno para poder sobrevivir. Siempre buscando nuevos alimentos o medicinas que permitieran una mejor adaptación, el hombre desarrolló una gran capacidad de observación para comparar las estructuras vegetales, minerales, animales y hongos con las estructuras anatómicas humanas. El gran maestro de este arte fue Paracelso, y esta práctica se llama signatura. La signatura es un signo, señal o firma que manisfiesta determinado vegetal (o ser vivo) que nos sirve para conocer sus propiedades, que podrían aprovecharse para la curación. Jordi Canellas ofrece en esta obra un estudio pionero de la signatura de las Flores de Bach, que nos permitirá profundizar en el conocimiento de las esencias, reencontrarnos con el mensaje de la naturaleza y cada esencia, y hallar nuevas flores que puedan ayudar a la evolución humana y la curación.