La Baltasara es una actriz de renombre del primer tercio del siglo XVII, que se retiró de los escenarios en mitad de una representación para vivir en una cueva a las afueras de Cartagena, donde rememora su vida y reflexiona sobre las razones que la apartaron de la fama y de la admiración de su público. A lo largo de la representación, la actriz repasa la función que estaba interpretando en un teatro de Valencia, el Corral de la Olivera, cuando decidió cambiar la gloria y el reconocimiento de las tablas por la soledad y el silencio de su retiro.