Cada días del año con Juan Pablo II (1920-2005). A través de una cuidada selección de textos del gran Papa, realizada por el carmelita Juan Gil Aguilar, su magisterio permanece vivo. Y su grata presencia diaria es una invitación a seguir con mayor fidelidad a Cristo, a amar a su Iglesia, a confiar en la poderosa interseción de María, cuyo ejemplo nos lleva a orientar nuestra vida por los caminos del Evangelio.