Lo curioso es que esta anécdota la protagonizan dos de estos personajes.
En el estreno de su obra «Santa Juana», Shaw envió a su cordial enemigo Churchill dos entradas con una nota, diciendo que una era para él y otra para un amigo «si tiene uno». Churchill le escribió una nota de agradecimiento, disculpándose por no poder asistir al estreno y pidiéndole entradas para la segunda función «si es que la hay».