Preguntan a Bertrand Russell si podía la Filosofía aportar algo práctico, alguna idea para la vida.
Tres ideas claras, prácticas y necesarias:
- Tener valor para aceptar, resignadamente, las cosas que no se pueden cambiar.
- Valentía para cambiar las que sí se pueden cambiar.
- Tener la inteligencia indispensable para no confundir nunca las unas con las otras.
Es decir, paciencia, coraje y sensatez para no complicarse y amargarse tonta, inútil y estérilmente la vida.