Para santa Teresa de Lisieux «la caridad perfecta consiste en soportar los defectos de los demás, en no escandalizarse de sus debilidades».
Reaccionar con humilde mansedumbre, esto es santidad.
Para santa Teresa de Lisieux «la caridad perfecta consiste en soportar los defectos de los demás, en no escandalizarse de sus debilidades».
Reaccionar con humilde mansedumbre, esto es santidad.