La avaricia es una de las principales fuentes del mal (sic. pecado capital). Muchos se mueven por dinero y eso es lo que les motiva. El problema del dinero no es tenerlo (que es necesario para vivir una vida ordenada) sino que cuando lo tienes siempre quieres más.
Es conocida la frase del sabio griego Demóstenes que paseando por un suntuoso mercado persa espetó a sus peripatéticos acompañantes «cuántas cosas que no necesito» y se largó.
Otros, que tienen mucho dinero se afanan en carrera loca por conseguir más. Eso podría estar en la raíz del Guinness, una de las «modernas locuras».
Cuando el medio (que es el dinero) se pone como fin y no hay una moral por medio, todo vale. Este que ofrecemos más abajo es un ejemplo de LA AVARICIA ROMPE EL SACO.
Descubren sepultado el cadáver del ganador de 31 millones de dólares
Abraham Shakespeare, camionero desaparecido desde el pasado mes de noviembre, ha sido hallado enterrado bajo una losa de cemento por las autoridades de Florida, en EEUU. El hombre había ganado 31 millones en la lotería hace cuatro años pero había sido acusado de robar el boleto ganador.
Las autoridades del estado de Florida, en EE.UU abrieron la investigación de la misteriosa muerte de un hombre que ganó 31 millones de dólares en la lotería, hace cuatro años.
El cadáver de Abraham Shakespeare fue descubierto el jueves pasado, sepultado bajo una losa de cemento, en una vivienda de la ciudad de Plant City después de que la policía recibiera una llamada anónima, según informó la cadena de televisión CNN.
Los restos de Shakespeare, un camionero de 43 años, fueron identificado por las autoridades forenses y el alguacil del condado de Hillsborough, David Gee, indicó que se sospecha que su muerte fue causada «por medios y motivos siniestros«.
Un año después de recoger el premio, Shakespeare ganó una demanda judicial presentada por otro camionero quien lo acusó de arrebatarle el boleto cuando entregaban carne en restaurantes de Miami.
La cadena de televisión informó de que la familia de Shakespeare denunció que desconocía su paradero desde el 9 de noviembre del año pasado.
Según manifestó Grady Judd, alguacil del condado de Polk, la policía esperaba encontrarlo con vida ante la creencia de que se había ocultado para huir de quienes le pedían dinero.
Pero al continuar la pesquisa, «la información que desarrollamos nos llevó a creer que posiblemente encontró una muerte inoportuna«, añadió.
Según Gee, la policía de los condados de Hillsborough y Polk investiga lo que se cree es un claro caso de asesinato a sangre fría.
Extraído de aquí.