Los primeros auxilios psicológicos (PAP) son una intervención temprana diseñada para proporcionar apoyo emocional a personas que están atravesando situaciones de crisis. Este tipo de intervención puede ayudar a aliviar el estrés inmediato, promover el bienestar y prevenir el desarrollo de problemas de salud mental a largo plazo. Aquí te presentamos una guía sobre cómo brindar primeros auxilios psicológicos en situaciones de crisis.
Principios básicos de los primeros auxilios psicológicos
- Escuchar
- Atención plena: Escucha con empatía y sin interrupciones. Haz contacto visual y muestra interés genuino en lo que la persona está diciendo.
- Validación: Reconoce y valida los sentimientos y experiencias de la persona. Frases como «Entiendo que esto es muy difícil para ti» pueden ser útiles.
- Proteger
- Seguridad física: Asegúrate de que la persona esté en un entorno seguro y libre de peligros.
- Seguridad emocional: Ofrece un espacio donde la persona se sienta emocionalmente segura y respetada.
- Conectar
- Apoyo social: Ayuda a la persona a conectarse con amigos, familiares o redes de apoyo que puedan ofrecer asistencia adicional.
- Recursos profesionales: Facilita el acceso a servicios de salud mental y otros recursos comunitarios si es necesario.
Cómo brindar primeros auxilios psicológicos
- Establece un contacto inicial:
- Aproximación respetuosa: Acércate de manera calmada y respetuosa. Pregunta si puedes ayudar y ofrece tu apoyo.
- Presentación: Identifícate y explica brevemente que estás allí para ayudar. «Hola, soy [tu nombre]. Estoy aquí para ayudarte. ¿Te gustaría hablar sobre lo que está pasando?»
- Evalúa las necesidades y preocupaciones:
- Preguntas abiertas: Utiliza preguntas abiertas para comprender mejor la situación. «¿Puedes contarme lo que ha sucedido?» o «¿Cómo te sientes en este momento?»
- Identificación de prioridades: Ayuda a la persona a identificar sus necesidades y preocupaciones más urgentes.
- Proporciona apoyo práctico:
- Información clara: Ofrece información clara y sencilla sobre los pasos a seguir y los recursos disponibles.
- Asistencia práctica: Ayuda con necesidades prácticas inmediatas, como contactar a un familiar, organizar transporte o asegurar el acceso a alimentos y refugio.
- Fomenta el uso de estrategias de afrontamiento:
- Técnicas de respiración: Enseña técnicas simples de respiración profunda para ayudar a reducir la ansiedad. «Inhala lentamente por la nariz durante cuatro segundos, mantén la respiración durante cuatro segundos, y exhala lentamente por la boca durante cuatro segundos.»
- Actividades relajantes: Sugiere actividades que la persona encuentre relajantes o que le ayuden a distraerse, como escuchar música, dibujar o dar un paseo.
- Facilita el acceso a recursos y apoyo:
- Referencias profesionales: Proporciona información sobre cómo acceder a servicios de salud mental, líneas de ayuda y otros recursos comunitarios.
- Apoyo continuo: Asegúrate de que la persona sepa que puede volver a contactarte o acceder a otros recursos si necesita más ayuda en el futuro.
Consideraciones adicionales
- Respeto y confidencialidad: Mantén siempre el respeto por la persona y la confidencialidad de la información compartida.
- Culturalmente apropiado: Asegúrate de que tu apoyo sea culturalmente sensible y apropiado para la persona a la que estás ayudando.
- Autocuidado: Brindar apoyo emocional puede ser desafiante. Asegúrate de cuidar tu propio bienestar emocional y busca apoyo si lo necesitas.
Ejemplo de una situación
- Contexto: María, una estudiante universitaria, acaba de recibir noticias de que un familiar cercano ha fallecido. Está visiblemente angustiada y llorando en un rincón de la biblioteca.
- Contacto inicial:
- «Hola, soy [tu nombre]. Vi que estás pasando por un momento difícil. Estoy aquí para ayudarte. ¿Te gustaría hablar sobre lo que está pasando?»
- Escuchar y validar:
- María comparte que ha perdido a un familiar. «Entiendo que esto es muy doloroso. Es normal sentirse abrumada en una situación así.»
- Evaluar necesidades:
- Preguntas: «¿Hay alguien a quien te gustaría que llamáramos para que esté contigo?» «¿Hay algo que necesites en este momento?»
- Apoyo práctico:
- Ayuda a María a llamar a un amigo cercano para que la acompañe.
- Proporciona información sobre el centro de apoyo psicológico de la universidad.
- Afrontamiento:
- Enseña a María una técnica de respiración profunda para ayudarla a calmarse.
- Recursos:
- Da a María el número de la línea de apoyo emocional de la universidad y le ofrece acompañarla al centro de apoyo si lo desea.
Proporcionar primeros auxilios psicológicos de manera efectiva puede ayudar a las personas a sentirse comprendidas, seguras y apoyadas durante situaciones de crisis. Con una intervención temprana y adecuada, puedes marcar una diferencia significativa en su recuperación y bienestar.