Tu amor es como una de esas viejas consejas
que mientras son más viejas son más inolvidadas,
que tienen el prestigio de las cosas añejas
y el perfume de sándalo de las cosas guardadas.
Tu amor es más. Es como esos sueños que a veces
dudamos si son sueños o si son realidad,
que compensan lo duro de la vida con creces,
y que entreabren las puertas de la felicidad.
Es mucho más tu amor… Es como el cristalino
acariciar del agua que pasa sonriente,
y que deja la dulce huella de su camino
escrita sobre el bruno peñasco de la fuente.
Es todo eso tu amor, ese amor que en mi vida
ha dejado una huella y ha cerrado una herida.
Alberto J. Ureta