Soñé que pasaba frente a las camas de los alumnos que dormían y que sobre cada alumno veía una espada colgada (la muerte) y en la cabecera de cada uno había un número que indicaba los años que va a vivir en la tierra.
Muchos jóvenes fueron a preguntarle qué había visto junto a su cama. A uno le dijo: “Cuando cumplas los 60, prepárate a partir para el otro mundo”. Y así sucedió; murió 45 años después, cuando acababa de cumplir los 60 años.
El jovencito Tomatis le preguntó si le quedaba todavía mucho tiempo de vida y Don Bosco le respondió: – Te podría decir el tiempo exacto de vida que te queda, pero no te conviene. No te preocupes; vivirás largos años y serás sacerdote de Don Bosco y gastaras mucho tiempo salvando almas.
El joven estaba en primer año de bachillerato. Después de muchas dudas y peligros llegó a ser sacerdote de la comunidad fundada por Don Bosco. Como misionera en América estuvo varias veces en gravísimos peligros de muerte arrastrado por las corrientes de los ríos, y se libró milagrosamente de esos peligros. Por 37 años fue sacerdote misionero en América.