En la muerte de Severo Ochoa, Pilar Urbano escribió un artículo en el que recordaba una entrevista que le había hecho, en la que le preguntaba por el más allá: ¿Qué hay después de la muerte? ¿Dónde está quién fue su gran amor, su mujer? Etc. Y él, poniéndose de pie y agitado, respondió:
- “No lo sé, no lo sé, no lo sé…”
“Puedes escribir que soy un sabio que no sabe nada de lo que de verdad le interesa. Soy un sabio extraño. Un sabio que no sabe nada.”