Haz las cosas pequeñas como si fueran grandes, a causa de la majestad de Jesucristo, que las hace en nosotros, y que vive nuestra vida; y las grandes como si fueran pequeñas y fáciles, a causa de su omnipotencia.
Haz las cosas pequeñas como si fueran grandes, a causa de la majestad de Jesucristo, que las hace en nosotros, y que vive nuestra vida; y las grandes como si fueran pequeñas y fáciles, a causa de su omnipotencia.