“Es tan sin mancha su alma
y tan clara su belleza
que hasta el Espíritu Santo
se prendó de su pureza
y le ofreció a la Señora (bis)
el mejor de sus regalos:
su nombre Blanca Paloma”
(Canto rociero)
“Es tan sin mancha su alma
y tan clara su belleza
que hasta el Espíritu Santo
se prendó de su pureza
y le ofreció a la Señora (bis)
el mejor de sus regalos:
su nombre Blanca Paloma”
(Canto rociero)