SANTA JUANA DE ARCO (30 de Mayo).
Virgen
1412 a 1431
1. “Dios por sobre todas las cosas” “Nadie organizaría un cacerolazo con esa condición”
Santa Juana de Arco se servía del culto externo para reformar en lo religioso a los soldados.
Llamó una vez al capellán y le expuso su preocupación. Luego le rogó que hiciese una bandera que representase a Cristo en la Cruz y a la Virgen María con san Juan a los lados. Todos los días debían reunirse los sacerdotes alrededor de ese estandarte. Se cantaban himnos en honor de la Virgen y se rezaba por la conversión de todos y el triunfo en la guerra. Poco a poco, los soldados empezaron a acudir y sentían renacer su amor a la religión. Aprovechaba la santa ese momento de fervor para decirles:
-Que nadie se una a mí sin haberse confesado. Ahí están los sacerdotes con quienes puede hacerse. Dicen que tuvo bastante éxito en estas exhortaciones.