1. Crecimiento poblacional y seguridad nacional

  • El NSSM 200 identificaba el crecimiento de la población en países en desarrollo como una amenaza potencial para los intereses económicos y geopolíticos de Estados Unidos.
  • Según el informe, una población creciente en estos países aumentaría la demanda de recursos como alimentos, agua y energía, llevando a una posible competencia directa con EE. UU. por dichos recursos.
  • Además, se planteó la idea de que un crecimiento poblacional elevado podría generar inestabilidad política en esas regiones, lo que, indirectamente, afectaría la seguridad de EE. UU.

2. Control de la población para asegurar el acceso a recursos naturales

  • El informe subrayaba que, con un control adecuado del crecimiento poblacional, los países en desarrollo tendrían menor presión sobre sus propios recursos naturales. De esta forma, EE. UU. vería menos competencia internacional por recursos como el petróleo y los minerales esenciales para su economía.
  • En este contexto, se sugirió que el gobierno estadounidense incentivara programas de planificación familiar y de control de natalidad en estos países como una estrategia para asegurar el suministro de estos recursos a largo plazo.

3. Programas de planificación familiar como herramienta geopolítica

  • El NSSM 200 abogaba por que EE. UU. proporcionara ayuda financiera y técnica para programas de planificación familiar y salud reproductiva en países en desarrollo, a través de entidades como las Naciones Unidas y organizaciones no gubernamentales.
  • El informe también proponía que la planificación familiar no fuera vista como una imposición, sino como una «ayuda» para que los países pudieran gestionar mejor sus recursos, evitando así cualquier percepción de intervención directa.

4. Influencia y alianzas internacionales

  • Para implementar estas políticas de manera efectiva, el documento sugería que EE. UU. trabajara en colaboración con organizaciones internacionales y otros países desarrollados, especialmente Europa.
  • La intención era establecer una coalición para apoyar la planificación familiar en países en desarrollo, minimizando las posibilidades de que estas naciones vieran a Estados Unidos como un actor único y dominante en esta política.
  • A través de esta cooperación, EE. UU. también buscaba reducir el riesgo de conflictos internacionales derivados de la presión por recursos, utilizando la planificación familiar como una herramienta diplomática.

5. Percepción de Europa y necesidad de mano de obra

  • El NSSM 200 sugería que Europa, al igual que EE. UU., experimentaría una disminución en su tasa de natalidad y un envejecimiento de la población, lo que podría crear una dependencia de la mano de obra proveniente de países en desarrollo.
  • Ante esta situación, el informe contemplaba que una reducción en la tasa de crecimiento poblacional en los países en desarrollo también beneficiaría indirectamente a Europa, ya que estos países tendrían poblaciones más pequeñas y, en teoría, más fáciles de «gestionar» en términos de flujos migratorios.

6. Críticas y controversia en torno al NSSM 200

  • Desde su desclasificación en 1989, el NSSM 200 ha sido objeto de críticas por parte de organizaciones de derechos humanos y académicos, quienes lo ven como una muestra de una política exterior neocolonialista.
  • Estas críticas señalan que el enfoque del documento pone los intereses económicos y de seguridad de EE. UU. por encima de las necesidades de desarrollo y bienestar de las poblaciones de los países en desarrollo, sugiriendo que el control de natalidad fue una estrategia para mantener la dominación económica de EE. UU. en esas regiones.