Un recadero un tanto especial
Era un hombre franco pero con flaquezas…
En Bellver de Cinca, fue el Pelaire a por cinco litros de buen vino, para las celebraciones de la iglesia.
Se fue pues a hacer el encargo, con garrafa y tomando el camino más corto, cruzando el río “al derecho”, le costó su tiempo ir y volver a Chalamera ya que hubo riada, y ya de vuelta lo preguntaron: ¿has traído el vino?, a lo que nuestro recadero enseñando la garrafa vacía y con la mano en la barriga contestó, “lo traigo pero no lo traigo”.