Querido/a [Nombre del destinatario]:
No hay palabras que puedan expresar adecuadamente el dolor y la tristeza que siento por la pérdida de tu hija. En este momento tan difícil, quiero que sepas que estoy aquí para ti y que cuentas con todo mi apoyo y cariño.
La vida a veces nos enfrenta con situaciones que parecen imposibles de superar, y la partida de un ser tan amado como tu hija es una de ellas. Ella fue una persona extraordinaria, llena de luz y alegría, y su recuerdo vivirá siempre en nuestros corazones. La huella que dejó en la vida de quienes la conocieron es imborrable, y su espíritu continuará inspirándonos.
Entiendo que ningún consuelo puede aliviar completamente el dolor que sientes ahora, pero quiero ofrecerte mi compañía y mi hombro para llorar. No estás solo/a en tu tristeza. Permíteme acompañarte en este camino, escucharte cuando lo necesites y ayudarte a recordar los momentos hermosos que compartieron juntos.
El duelo es un proceso personal y único, y cada uno de nosotros lo vive de manera diferente. Tómate el tiempo que necesites para sentir, para recordar y para sanar. No hay prisa ni una forma «correcta» de atravesar este dolor. Solo quiero que sepas que, en cada paso que des, estaré a tu lado.
Con todo mi cariño y más sentido pésame,
[Tu nombre]