Lejía + Amoniaco: Esta combinación genera vapores tóxicos de cloro que pueden ser extremadamente peligrosos para la salud respiratoria.
Lejía + Otros productos o con sal: La lejía, al combinarse con otros productos químicos como limpiadores ácidos o detergentes que contienen amoníaco, puede liberar gases tóxicos o reaccionar violentamente. La mezcla con sal también puede generar gases peligrosos.
Calentar lejía o diluirla con agua caliente: Calentar la lejía o mezclarla con agua caliente puede liberar vapores dañinos y aumentar el riesgo de salpicaduras.
Aguafuerte con ningún producto: El aguafuerte (ácido clorhídrico) es altamente corrosivo y puede producir reacciones peligrosas al mezclarse con otros productos químicos.
Salfuman con ningún producto: El salfuman (ácido sulfúrico concentrado) es extremadamente reactivo y puede causar reacciones violentas al combinarse con otros productos químicos.
Desatascadores con ningún producto: Los desatascadores, que a menudo contienen ácidos fuertes como hidróxido de sodio, no deben mezclarse con otros productos para evitar liberación de gases tóxicos o reacciones químicas peligrosas.
Vinagre + Agua oxigenada: Esta mezcla puede crear un ácido peracético corrosivo y potencialmente tóxico, por lo que es mejor usarlos por separado y en diferentes aplicaciones de limpieza.
Ácido clorhídrico (HCI) + Peróxido de hidrógeno (H₂O₂): Esta combinación puede generar cloro gaseoso, que es altamente tóxico e irritante para los ojos, la piel y las vías respiratorias.
Bicarbonato de sodio + Vinagre: Aunque esta mezcla es común en experimentos de limpieza, la efervescencia resultante puede ser violenta si se mezcla en un recipiente cerrado, causando riesgo de salpicaduras.
Cloro (blanqueador) + Amoníaco: Produce vapores de cloramina y gas cloro, ambos son extremadamente tóxicos y pueden causar daño pulmonar severo e incluso ser fatal en altas concentraciones.
Limpiadores ácidos + Limpiadores a base de cloro: La mezcla de limpiadores ácidos (como los que contienen ácido sulfúrico o ácido acético) con limpiadores que contienen cloro puede generar vapores tóxicos y corrosivos.
Alcohol + Lejía: Puede generar cloroformo y otros compuestos clorados, que son nocivos para la salud si se inhalan en concentraciones suficientes.
Desengrasantes a base de petróleo + Blanqueadores: Los desengrasantes que contienen hidrocarburos pueden reaccionar con el blanqueador para formar productos químicos peligrosos o inflamables.
Ácido clorhídrico (HCI) + Sulfato de cobre: Esta combinación puede generar gas de ácido clorhídrico, que es corrosivo y puede causar daños graves si se inhala.