Al sabio indio Sadhu Sundar Singh se le atribuye este símil escrito en uno de sus libros:
«Un día estaba yo sentado cerca del Himalaya, a la orilla de un río. Saqué del agua una piedra hermosa, dura, redonda, y la rompí. Su interior estaba completamente seco. Esta piedra hacía tiempo que estaba en el agua, pero el agua no había penetrado en ella.
Lo mismo ocurre con los hombres de Europa.
Hace siglos que fluye en torno suyo el Cristianismo, viven por completo dentro del Cristianismo, y éste no ha penetrado y no vive dentro de ellos.
La falta no está en el Cristianismo, sino en los corazones cristianos».
Añadimos que Sundar se convirtió a la fe cristiana.